domingo, 25 de agosto de 2019

Recaredo I, Rey De Los Visigodos ★ |•••► #España #Genealogia #Genealogy ♛Ref: K-443


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(Linea Paterna)
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Recaredo I, rey de los visigodos is your 29th great grandfather.
You→ Carlos Juan Felipe Antonio Vicente De La Cruz Urdaneta Alamo→   Enrique Jorge Urdaneta Lecuna
your father →  Elena Cecilia Lecuna Escobar
his mother →  María Elena de la Concepción Escobar Llamosas
her mother →  Cecilia Cayetana de la Merced Llamosas Vaamonde de Escobar
her mother →  Cipriano Fernando de Las Llamosas y García
her father → José Lorenzo de las Llamozas Silva
his father →  Joseph Julián Llamozas Ranero
his father →  Manuel Llamosas y Requecens
his father → Isabel de Requesens
his mother →  Luis de Requeséns y Zúñiga, Virrey de Holanda
her father →  Juan de Zúñiga Avellaneda y Velasco
his father → Pedro de Zúñiga y Avellaneda, II conde de Miranda del Castañar
his father →  Diego López de Zúñiga y Guzmán, I conde de Miranda del Castañar
his father →  Isabel Elvira de Guzmán y Ayala, III Señora de Gibraleón
his mother →  Elvira López de Ayala Guzmán
her mother → Leonor Suárez de Toledo y Guzmán
her mother →  D. Pero Suárez de Toledo, señor de Bolaños
her father → Teresa Vázquez de Acuña, Señora de Villaverde
his mother →  Vasco Martins da Cunha, "o Seco", 5º senhor de Tábua
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his mother →  Rodrigo Martins de Nomães, Señor de Reviñade y Silva-Escura
her father → Rodrigo Romães Conde de Monterroso
his father →  Remón II de Monterroso, III conde de Monterroso
his father → Rodrigo Romaes, II conde de Monterroso y de Santa Marta de Ortigueira
his father → Remón Romaes, Conde de Monterroso y Santa Marta de Ortigueira
his father →  Fruela I el Cruel, rey de Asturias
his father → Ermessenda, reina consorte de Asturias
his mother →  Pelayo, rey de Asturias
her father →  Liubigotona
his mother →  Suintila, rey de los visigodos
her father → Recaredo I, rey de los visigodos
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Reikirēþs MP
Gender: Male
Birth: estimated between 521 and 581
Death: between June 601 and December 601
Toledo, Toledo, Castille La Mancha, Spain
Immediate Family:
Son of Leovigildo, rey de los visigodos and Teodósia de Cartagena
Husband of N.N.; Floresinda and Baddo
Fiancé of Rigundis and Clodesinde
Father of Nn; Liuva II, rey de los visigodos; Suintila, rey de los visigodos; Geila (Agilano) Balthes and Swinthila of the Visigoths
Brother of Sto. Hermenegildo II, rey de los visigodos
Half brother of NN Leodegildsdatter
Added by: Michael Brian Flowers on July 27, 2007
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http://es.wikipedia.org/wiki/Recaredo

Recaredo I (¿? – 601) fue rey de los visigodos desde 586 a 601, cuando murió en Toledo.

Hijo y sucesor de Leovigildo, combatió a los francos, a los bizantinos (aún presentes en el litoral andaluz) y a los vascones, y hubo de sofocar varias revueltas de los nobles visigodos.

El hecho más destacado de su reinado se produjo en 589, cuando convocó el III Concilio de Toledo en el que, junto con varios nobles y dignatarios eclesiásticos, abjuró del arrianismo y se convirtió al catolicismo, con lo que llevó a cabo la unificación religiosa entre visigodos e hispanorromanos, a la que aspiró su padre de forma inversa y quien, al parecer y paradójicamente, le aconsejó esta vía.

Hermano de Hermenegildo, fue asociado al trono por su padre, lo que levantó las protestas de los nobles visigodos, que vieron en esta acción el intento de institucionalizar el hereditarismo en la monarquía visigoda, caracterizada precisamente por ser electiva.

En 584 envío embajadores a Francia para desposar con Rigunthe, hija de Chilperico I y Fredegunda, una vez acordado el matrimonio Rigunthe fue enviada junto con su dote en agosto de 584 al Reino visigodo de Hispania para casarse con Recaredo en una comitiva que superba las cuatro mil personas, sin embargo cuando la comitiva se encontraba en Toulouse, llegó la noticia de la muerte de Chilperico. Al perder el favor real su dote fue incautada por el duque Desiderio. Estas noticias llegaron en enero de 585 a la corte de Recaredo, ante este nuevo escenario deja nulo el acuerdo y envía una nueva delegación de embajadores para desposar a Clodosvinda, hija de Sigeberto I rey de Austrasia y Brunegilda, con ella tuvo al futuro rey visigodo Suintila. Este nuevo matrimonio duraría poco, ya que en mayo de 589 Recaredo se encontraba casado con Baddo, llamada también Bauda o reina Badona, con quien no tuvo descendecia.

Acceso al trono [editar]
Cuando su padre Leovigildo murió, Recaredo se encontraba en Septimania. Seguramente permaneció allí, pues proseguía la guerra contra Gontrán I de Borgoña, pese a la derrota de éste el año anterior. Carcasona fue atacada de nuevo por Desiderio, noble neustrio que ostentaba el cargo de dux de Aquitania, si bien fue rechazado.

Paz con Austrasia y guerra con Borgoña [editar]

Recaredo, aconsejado por su madrastra Gosuinda, envió mensajeros a Childeberto II de Austrasia pidiendo la paz. Había ya pasado mucho tiempo desde que Gosuinda maltratara a Ingundis y el tratado pudo concertarse con cierta facilidad. Como no existía ningún conflicto pendiente con Neustria, sólo uno de los tres reyes merovingios, Gontrán I de Borgoña, permanecía hostil a los visigodos.

Recaredo envió también mensajeros a Gontrán, pero éste se negó a recibirlos y cerró la frontera con Septimania. Los visigodos realizaron diversos ataques en la región de la desembocadura del Ródano.

Ejecución de Sisberto [editar]

No mucho después de su acceso al trono, el nuevo rey hizo ejecutar al godo Sisberto, responsable de la muerte de su hermano Hermenegildo, aunque probablemente por orden de Leovigildo, pues de no haber tenido la autorización del rey, no hubiera podido desobedecerle tan gravemente y seguir viviendo.

Conversión de Recaredo [editar]
A principios del año 587 Recaredo, que ya debía de tener simpatías católicas, se hizo bautizar en secreto. Desde entonces intentó convencer a los obispos arrianos para que aceptaran la doctrina trinitaria, celebrando tres reuniones: una con los obispos arrianos, a los que animó a reunirse con obispos católicos para discutir los problemas teológicos y determinar cuál era la verdadera fe; una reunión conjunta de obispos católicos y arrianos, con fuertes polémicas entre ambos bandos, y con un Recaredo presionando a favor de los católicos; y finalmente, no habiendo logrado convencer a los arrianos, una reunión con los obispos católicos a los que comunicó que ya había realizado su opción por el catolicismo. Estaban presentes muchos nobles visigodos, y al parecer casi todos ellos siguieron a su rey. Hacia la primavera y el verano del 587 las Iglesias arrianas fueron expropiadas y entregadas a los católicos.

Nuevas embajadas a los reyes francos [editar]

Tras su conversión, Recaredo envió nuevas embajadas a Childeberto de Austrasia y Gontrán de Borgoña. Ofreció a Childeberto una fuerte suma (diez mil sueldos) y el rey austrasiano (aconsejado por su madre Brunegilda) reconoció que Recaredo no era culpable en absoluto de la muerte de Ingundis, concertándose un tratado de alianza. Incluso Recaredo negoció su enlace con Clodosinda, hermana de Childeberto, pero para concederla Brunegilda pidió el asentimiento de Gontrán. La embajada enviada a Borgoña solicitó este consentimiento pero Gontrán se negó a darlo. Unos meses después, Childeberto manifestó su aprobación del enlace, alegando que le constaba que los visigodos ya eran católicos, pero al parecer no llegó a celebrarse, pues en el 589 el rey ya estaba casado con Baddo o Bado o Bada, una ilustre dama goda.

Conspiraciones arrianas y nueva guerra con Borgoña [editar]

La reacción arriana no se hizo esperar. El obispo arriano de Mérida, Sunna, y los nobles godos Segga y Vagrila (probablemente condes) proyectaron asesinar al obispo local católico, Masona y al dux de Lusitania, Claudio, y alzar a toda la provincia, seguramente proclamando rey a Segga. No sabemos el desarrollo de la conspiración, pero parece ser que algunos nobles godos —que habían accedido a volver al arrianismo— recuperaron su antigua fe y que muchos ciudadanos romanos (supuestamente católicos) se les unieron. Al fracasar el intento de asesinato de Masona, uno de los conjurados, el futuro rey Witerico, seguramente conde, reveló los detalles de la conjura. Claudio sofocó fácilmente el intento. A Segga se le cortaron las manos (castigo que parece haber estado reservado a los usurpadores), se confiscaron sus propiedades y fue desterrado a Galicia. Vagrila se refugió en la hoy Basílica de Santa Eulalia (Mérida), y el rey ordenó confiscar sus propiedades y entregarlas a dicha Iglesia, pero el obispo Masona le perdonó y se las devolvió. Sunna recibió la oferta de recibir otro obispado si se convertía al catolicismo (el obispado arriano de Mérida debió quedar suprimido y el católico ya estaba cubierto, en todo caso el obispado ofrecido no sería metropolitano). Sunna se negó y fue desterrado, marchando a Mauritania, donde propagó el arrianismo hasta su muerte violenta, cuya fecha se desconoce (se supone que alrededor del 600).

Recaredo ordenó la quema de todos los libros y textos arrianos, excluyó a los arrianos de cualquier cargo público y suprimió la organización de la Iglesia arriana, que desapareció en pocos años. Algunos godos fueron obligados a convertirse al catolicismo.

Un segundo intento arriano tuvo como protagonistas al obispo Uldila, cuya sede se desconoce, suponiéndose que pudiera ser el obispo de Toledo, que aunque nominalmente había abjurado, conservaba sus creencias arrianas, y a la reina Gosuinda, viuda de Atanagildo y Leovigildo. La conspiración fue abortada y Uldila enviado al exilio. Gosuinda murió poco después.

Una tercera conspiración se planificaba desde hacía unos meses: algunos nobles de Septimania preparaban una conjura para derrocar al rey. La encabezaban los condes Granista y Wildigerno y el obispo arriano de Narbona, Athaloc. Los conspiradores pidieron ayuda al rey de Borgoña Gontrán (que era católico).

Las hostilidades con Borgoña, suspendidas desde el 586, se reanudaron súbitamente en el 589. Las fuerzas borgoñonas al mando de Boso, que habían sido llamadas por los conspiradores, se acercaron a Carcasona, que al parecer fue ocupada, pero fueron derrotadas por fuerzas visigodas al mando de Claudio, dux de la provincia Lusitana (aparentemente hispanorromano, aunque pudo haber adoptado un nombre romano al convertirse al catolicismo), en las cercanías del río Aude. Los francos dejaron sobre el terreno cinco mil cadáveres y dos mil prisioneros. La derrota fue completa y la seguridad de Septimania quedó asegurada. Parece ser que Granista y Wildigerno murieron en la lucha y que Athaloc falleció poco después de muerte natural.

El Concilio de Toledo [editar]

Poco antes de celebrarse el Concilio de Toledo, Recaredo comunicó que dejaba sin efecto la prohibición para la Iglesia de celebrar Sínodos provinciales de obispos.

El 8 de mayo del 589 se inició el III Concilio de Toledo. Recaredo hizo profesión de fe católica y anatematizó a Arrio y sus doctrinas, se atribuyó la conversión del pueblo godo y suevo al catolicismo. Varios obispos arrianos abjuraron públicamente de sus creencias, entre ellos cuatro probablemente suevos: Beccila de Lucus (Lugo), Gardingus de Tute (Tuy), Argiovittus de Portus Cale (Oporto) y Sunnila de Vaceum (Viseo, seguramente de la provincia Lusitana); y otros cuatro godos: Ugnus de Barcino (Barcelona), Fruisclus de Dertosa (Tortosa), Murila y Ubiligisclus de Valentia (Valencia). Sabemos que a la reunión asistió un obispo de Pamplona llamado Loliolo (de nombre godo), pero posteriormente la sede dejó de estar representada hasta el año 684. Las resoluciones del Sínodo arriano de Toledo del 580 fueron condenadas. Asistieron al Concilio setenta y dos obispos, personalmente o mediante delegados (además de los cinco metropolitanos), siendo las figuras principales Leandro de Sevilla (instigador de la conversión de Hermenegildo) y el abad de Servitanum, Eutropio.

Las decisiones del Concilio adquirieron fuerza de ley al publicar el rey un Edicto de confirmación del Concilio. La desobediencia era castigada con graves penas (la confiscación de la mitad de los bienes para los honestiores y el destierro y la pérdida de sus propiedades para los inferiores).

La cuarta conspiración [editar]

Después del Concilio se organizó una nueva conspiración liderada por Argimundo, dux de una provincia (tal vez la Cartaginesa), y personas influyentes del palacio. Aunque los conjurados pretendían asesinar al rey y proclamar en su lugar a Argimundo, se ignora si intentaban restablecer el arrianismo. Descubierta la conjura, Argimundo sufrió decalvación y amputación de la mano derecha.

Cambios sociales [editar]

Sabemos que, coincidiendo con la conversión al catolicismo, se produjeron algunos cambios sociales entre los godos: su forma de vestir se adaptó a la de los romanos, desapareciendo los tradicionales broches y hebillas, y las propiedades de los difuntos ya no se enterraron con éstos.

Familia de Recaredo [editar]

Hubo negociaciones para casar a Recaredo con las princesas francas Rigunthis y Clodosinda, pero no consta que dichos enlaces llegaran a celebrarse. De hecho el 589 Recaredo aparece casado con la dama goda Baddo o Bado o Bada, supuesta hija de Fanto, conde de las Larguiciones. Aunque se ignora la fecha de nacimiento del rey, sí se sabe que Hermenegildo, su hermano mayor, había nacido hacia el 564, por lo que él mismo hubo de nacer el 565 o después de esta fecha. Por tanto, en 589 contaba como máximo 24 años de edad. Su hermano Hermenegildo se casó el 579, contando, pues, 15 años de edad (la princesa Ingundis tendría unos 13 ó 14 años). Las negociaciones para casarlo con Rigunthis se realizaron hacia el 582 ó 583 cuando contaría poco más de 15 años, y las nuevas negociaciones de las que tenemos noticias son del 587, cuando contaba con poco más de 20 años. El enlace ya debía tener cierta urgencia, no por el hecho de que ya era rey (pues la monarquía no era hereditaria), sino por la edad de Recaredo, que inmediatamente casó con una dama goda. El enlace con Clodosinda, que algunos autores suponen realizado después de enviudar de Bada, no debió tener lugar, puesto que no cabe imaginar negociaciones para un enlace estando ya casado. Como su hijo mayor Liuva nació hacia el 581 ó 582 (en todo caso antes del 584), se le supone hijo natural, extremo apoyado por el texto de la Crónica de San Isidoro, que dice: «Ignobile quidem matre progenitus, sed virtutum indole in signitus» (que podría traducirse por «Fue creado por una madre sin duda oscura, pero destacó su carácter virtuoso»). Los otros hijos habidos, Suintila y Geila, habrían nacido, por tanto, de Bada.

La cuestión bizantina [editar]

Hacia el 599 se desarrolló una guerra contra los bizantinos, sin que sepamos las causas ni la evolución, aunque parece que la lucha fue favorable a Bizancio, que ocupó diversos territorios (no muy extensos en todo caso). Debió ser tras ello que Recaredo solicitó por mediación del Papa una copia del tratado concertado con los bizantinos, que fijaba los límites de la provincia de Spania (se supone que el ejemplar de los visigodos se habría perdido y el ejemplar imperial se supone destruido en un incendio seguramente en el 564 ó 565). El Papa le respondió que desistiera de ello, pues caso de aparecer el tratado, aun con las presuntas conquistas bizantinas, el reino visigodo resultaría perjudicado, ya que la extensión de la provincia debía ser menor que en el momento del tratado (¿551?, ¿564?). Como sabemos que Leovigildo había recobrado toda o parte de la región del Estrecho (con Asidona), las regiones cercanas a Málaga y Baza (y tal vez la misma Baza) y probablemente el territorio entre Baza y Málaga, las regiones ocupadas por los bizantinos se situarían bien en la zona costera entre Málaga y Cartagena o bien en la zona del Estrecho.

Muerte de Recaredo [editar]

Recaredo murió en Toledo el 21 de diciembre del año 601, y le sucedió su joven hijo Liuva II, del cual distintos autores discrepan sobre su legitimidad.

Recaredo I (? - 601), fue rey de los visigodos desde 586 a 601, cuando murió en Toledo.

Hijo y sucesor de Leovigildo, combatió a los francos, a los bizantinos (aún presentes en el litoral andaluz) y a los vascones, y hubo de sofocar varias revueltas de los nobles visigodos.

El hecho más destacado de su reinado se produjo en 589, cuando convocó el III Concilio de Toledo en el que, junto con varios nobles y dignatarios eclesiásticos, abjuró del arrianismo y se convirtió al catolicismo, con lo que llevó a cabo la unificación religiosa entre visigodos e hispanorromanos, a la que aspiró su padre de forma inversa y quien, al parecer y paradójicamente, le aconsejó esta vía. Ignacio Olagüe Videla en La Revolución islámica en Occidente propone, sin embargo, que el arrianismo y, en menor medida, el paganismo o el gnosticismo no desaparecieron de España con la conversión de Recaredo.

(http://es.wikipedia.org/wiki/Recaredo)

Rey de los visigodos, 595

FUENTES:

-http://www.abcgenealogia.com/Godos00.html

Wikipedia:

Reccared (or Recared) I (reigned 586—601) was Visigothic King of Hispania, Septimania and Galicia. His reign marked a climactic shift in history, with the king's renunciation of traditional Arianism in favour of Catholic Christianity in 587.

Reccared was the younger son of King Liuvigild by his first wife. Like his father, Reccared had his capital at Toledo. The Visigothic kings and nobles were traditionally Arian Christians, while the Hispano-Roman population were Trinitarian Catholics. The Catholic bishop Leander of Seville was instrumental in converting the elder son and heir of Liuvigild, Hermenegild, to Trinitarian Christianity. Leander supported him in a war of rebellion and was exiled for his role.

When King Liuvigild died, within a few weeks of April 21, 586, St. Leander was swift to return to Toledo. The new king had been associated with his father in ruling the kingdom and was acclaimed king by the Visigothic nobles without opposition. Guided by his Merovingian kinship connections and by his Arian stepmother Goiswinth, he sent ambassadors to greet her grandson Childebert II and to his uncle Guntram, the Frankish king of Burgundy, proposing peace and a defensive alliance. Guntram refused to see them.

In January 587, Reccared renounced Arianism for Catholicism, the single great event of his reign and the turning point for Visigothic Hispania. Most Arian nobles and ecclesiastics followed his example, certainly those around him at Toledo, but there were Arian uprisings, notably in Septimania, his northernmost province, beyond the Pyrenees, where the leader of opposition was the Arian bishop Athaloc, who had the reputation among his Catholic enemies of being virtually a second Arius. Among the secular leaders of the Septimanian insurrection, the counts Granista and Wildigern appealed to Guntram of Burgundy, who saw his opportunity and sent his dux Desiderius. Reccared's army defeated the Arian insurgents and their Catholic allies with great slaughter, Desiderius himself being slain.

The next conspiracy broke out in the west, Lusitania, headed by Sunna, the Arian bishop of Mérida, and count Seggo. Claudius, Reccared's dux Lusitaniae, put down the rising, Sunna being banished to Mauritania and Seggo retiring to Gallaecia. In the latter part of 588 a third conspiracy was headed by the Arian bishop Uldila and the queen dowager Goisvintha, but they were detected, and the bishop was banished. This Arian resistance is not often mentioned in popular history.

The Third Council of Toledo, organized by St. Leander but convened in the king's name in May 589, set the tone for the new Catholic kingdom. The public confession of the king, read aloud by a notary, reveals by the emphatic clarity of its theological points and its quotations of scripture that it was ghost-written for the king. Bishop Leander also delivered the triumphant closing sermon, which his brother Isidore entitled Homilia de triumpho ecclesiae ob conversionem Gothorum a homily upon the "triumph of the Church and the conversion of the Goths". The text of the homily survives. Leander and the Catholic bishops immediately instituted the program of forced conversion of Jews and extirpation of the remains of Arianism as "heresy". Catholic history traditionally imputes these persecutions to the Visigothic kings. When, after Reccared's reign, at a synod held at Toledo in 633, the bishops took upon themselves the nobles' right to select a king from among the royal family, the transfer of power was complete.

Traditional Catholic sources for the reign of Reccared, the bishops Gregory of Tours and Isidore of Seville, report with approval a vigorous policy against the Jews, pursuing zealous and fanatical policies limiting Jewish freedoms as promulgated in the canons of synods. Modern historians have revised this view and see a continuation of traditional Visigothic tolerance. Pope St. Gregory I was convinced that Reccared refused bribes from the Jewish community, which was large, well-connected throughout the Mediterranean and powerful, and Reccared's laws provided that the offspring of a Christian and a Jew be baptised, which was of little moment to the Jewish community, as whether it was not born of a Jewish mother or was born of a Jewish woman outside her community, the child was not considered a Jew anyway. Reccared eliminated the death penalty for Jews convicted of proselytising among Christians and ignored Gregory's request that the trade in Christian slaves at Narbonne be forbidden to Jews. Among the canons of five synods during Reccared's reign, E. A. Thompson could find none disadvantaging the Jewish community.

The information for the rest of Reccared's reign is scanty. St. Isidore of Seville, bishop Leander's brother, praises his peaceful government, clemency, and generosity: standard encomia. He returned various properties, even some privates ones, that had been confiscated by his father, and founded many churches and monasteries. St. Gregory the Great, writing to Reccared in Aug. 599 (Epp. ix. 61, 121), extols him for embracing the true faith and inducing his people to do so, and notably for refusing the bribes offered by Jews to procure the repeal of a law against them. He sends him a piece of the True Cross, some fragments of the chains of St. Peter, and some hairs of St. John the Baptist.

Reccared was succeeded by his youthful son Liuva II.

Reccared I, King of Spain
b. circa 559, d. June 601

Father Leovigild I, King of Spain b. circa 512, d. circa April 586

Mother Theodosia of Cartagena b. circa 530

Reccared I, King of Spain was born circa 559. He was the son of Leovigild I, King of Spain and Theodosia of Cartagena. Reccared I, King of Spain was the successor of Leovigild I, King of Spain; King of the Visigoths.1 Reccared I, King of Spain and Rigonthe des Francs were engaged in 584; With the death of her father, Chilperic I, this marriage never came to pass.2 King of the Visigoths at Spain between April 586 and 601.1 Reccared I, King of Spain renounced his Arian faith and converted to Catholicism in 587.1 He and Basina des Francs were engaged after 588; Though there was a possibility that there would be a marriage, Radegund, her step-grandmother, Thuringian wife of Chlothar I, quickly cancelled the plan. Reccared I, King of Spain and Chlodoswinthe des Francs were engaged in 589; This was Chlodosinda's 2nd engagement. It also did not come to pass.3,2 Reccared I, King of Spain married Chlodoswinthe des Francs, daughter of Sigibertus I, rex Austrasii and Brunechildis the Visigoth, in 594; RGD says this marriage in fact occured, and the son, Swinthila, resulted.4 Reccared I, King of Spain married Baddo the Visigoth in 595; "another wife, a Gothic lady."5 Reccared I, King of Spain died in June 601.4,2
Family 1

Child

Sisebut, King of Spain+ b. c 570, d. 621

18º REI VISIGODO da Espanha

Na Wikipedia:

http://pt.wikipedia.org/wiki/Recaredo_I

O rei visigodo Recaredo (reg. 586—601) era o mais jovem dos filhos das primeiras núpcias de Leovigildo. A exemplo de seu pai, Recaredo fez de Toledo a sua capital.

Gregório o Grande chamava Recaredo de "Rei dos godos e dos suevos", rex Gothorum atque Suevorum. Os reis e nobres visigodos eram tradicionalmente cristãos arianos, enquanto que a população hispano-romana era católica trinitária. O bispo católico Leandro de Sevilha logrou converter o primogênito de Leovigildo, chamado Hermenegildo, à fé católica, e apoiou-o numa rebelião, o que lhe valeu o exílio (e, no caso de Hermenegildo, a morte).

Com a morte de Leovigildo em 586 e a aceitação do catolicismo por Recaredo em 587, este pôde proceder à conversão do reino à fé de Roma, o que foi confirmado pelo III Concílio de Toledo, de 589.

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Clodesinde
fiancée

Suintila, rey de los visigodos
son

Geila (Agilano) Balthes
son

Swinthila of the Visigoths
son

Baddo
wife

Liuva II, rey de los visigodos
son

Rigundis
fiancée

Floresinda
wife

Nn
daughter

N.N.
wife

Leovigildo, rey de los visigodos
father

Teodósia de Cartagena
mother
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Recaredo I
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Recaredo
Rey de los visigodos
Recaredo I, rey de los Visigodos (Museo del Prado).jpg
Información personal
Nacimiento 559
Fallecimiento 21 de diciembre del 601
Toledo
Predecesor Leovigildo
Sucesor Liuva II
Familia
Padre Leovigildo
Madre ?
Consorte Baddo o Bada
Descendencia Liuva II
Suintila[cita requerida]
Desconocido (padre de Agila, conde
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Recaredo I (en latín: Flavius Reccaredus, en gótico: RekkareÞ) (559-Toledo, 21 de diciembre del año 601) fue rey de los visigodos desde el 586 hasta el 601, cuando murió en Toledo.

Hijo y sucesor de Leovigildo y de su primera mujer, combatió a los francos, a los bizantinos (aún presentes en el litoral andaluz) y a los vascones, y hubo de sofocar varias revueltas de los nobles visigodos.

El hecho más destacado de su reinado se produjo en 589, cuando convocó el III Concilio de Toledo en el que, junto con varios nobles y dignatarios eclesiásticos, abjuró del arrianismo y se convirtió al catolicismo, con lo que llevó a cabo la unificación religiosa entre visigodos e hispanorromanos, a la que aspiró su padre de forma inversa y quien, al parecer y paradójicamente, le aconsejó esta vía, quedando así sellada la unidad espiritual y territorial del Reino Visigodo de Hispania.


Índice
1 Biografía
1.1 Acceso al trono
1.2 Paz con Austrasia y guerra con Borgoña
1.3 Ejecución de Sisberto
1.4 Conversión de Recaredo
1.5 Nuevas embajadas a los reyes francos
1.6 Conspiraciones arrianas y nueva guerra con Borgoña
1.7 El III Concilio de Toledo
1.8 La cuarta conspiración
1.9 Cambios sociales
1.10 Familia de Recaredo
1.11 La cuestión bizantina
1.12 Muerte de Recaredo
2 Referencias
3 Bibliografía
4 Véase también
5 Enlaces externos
Biografía
Hermano de Hermenegildo, fue asociado al trono por su padre, lo que levantó las protestas de los nobles visigodos, que vieron en esta acción el intento de institucionalizar el hereditarismo en la monarquía visigoda, caracterizada precisamente por ser electiva.

En 584, en su deseo de emparentar y alcanzar una alianza con los francos, envió embajadores para desposar con Rigunda, hija de Chilperico I, rey de Neustria, y Fredegunda. Una vez acordado el matrimonio, Rigunda fue enviada junto con una espléndida dote, en agosto de 584, al Reino visigodo de Hispania para casarse con Recaredo. Tras un viaje muy azaroso, con multitud de robos que la dejaron sin nada, llegó a Toulouse, donde le llegó la noticia del asesinato de su padre Chilperico, con lo que su matrimonio con el rey visigodo ya no tenía sentido para ser una alianza entre reinos. Poco tiempo más tarde, manteniendo el mismo deseo de emparentar con los francos, Recaredo envió una nueva delegación de embajadores para desposar a Clodosinda, hija de Sigeberto I, rey de Austrasia, y Brunegilda, pero por razones que se desconocen las negociaciones fracasaron.

Acceso al trono
Cuando su padre Leovigildo murió, Recaredo se encontraba en Septimania. Seguramente permaneció allí, pues proseguía la guerra contra Gontrán I de Borgoña, pese a la derrota de éste el año anterior. Carcasona fue atacada de nuevo por Desiderio, noble neustrio que ostentaba el cargo de dux (Duque) de Aquitania, si bien fue rechazado.

Paz con Austrasia y guerra con Borgoña
Recaredo, aconsejado por su madrastra Gosuinda, envió mensajeros a Childeberto II de Austrasia pidiendo la paz. Había ya pasado mucho tiempo desde que Gosuinda maltratara a Ingundis y el tratado pudo concertarse con cierta facilidad. Como no existía ningún conflicto pendiente con Neustria, sólo uno de los tres reyes merovingios, Gontrán I de Borgoña, permanecía hostil a los visigodos.

Recaredo envió también mensajeros a Gontrán, pero éste se negó a recibirlos y cerró la frontera con Septimania. Los visigodos realizaron diversos ataques en la región de la desembocadura del Ródano.

Ejecución de Sisberto
No mucho después de su acceso al trono, el nuevo rey hizo ejecutar al godo Sisberto, responsable de la muerte de su hermano Hermenegildo, aunque probablemente por orden de Leovigildo, pues de no haber tenido la autorización del rey, no hubiera podido desobedecerle tan gravemente y seguir viviendo.

La conversión de Recaredo:
En la era DCXXIIII, en el año tercero del imperio de Mauricio, muerto Leovigildo, fue coronado rey su hijo Recaredo. Estaba dotado de un gran respeto a la religión y era muy distinto de su padre en costumbres, pues el padre era irreligioso y muy inclinado a la guerra; él era piadoso por la fe y preclaro por la paz; aquél dilataba el imperio de su nación con el empleo de las armas, éste iba a engrandecerlo más gloriosamente con el trofeo de la fe. Desde el comienzo mismo de su reinado, Recaredo se convirtió, en efecto, a la fe católica y llevó al culto de la verdadera fe a toda la nación gótica, borrando así la mancha de un error enraizado. Seguidamente reunió un sínodo de obispos de las diferentes provincias de España y de la Galia para condenar la herejía arriana. A este concilio asistió el propio religiosísimo príncipe, y con su presencia y su suscripción confirmó sus actas. Con todos los suyos abdicó de la perfidia que, hasta entonces, había aprendido el pueblo de los godos de las enseñanzas de Arrio, profesando que en Dios hay unidad de tres personas, que el Hijo ha sido engendrado consustancialmente por el Padre, que el Espíritu Santo procede conjuntamente del Padre y del Hijo, que ambos no tienen más que un espíritu y, por consiguiente, no son más que uno.
— (Las historias de los godos, vándalos y suevos,
de Isidoro de Sevilla, ed. Cristóbal Rodríguez Alonso, León, 1975, pp. 261–263).
Conversión de Recaredo
Artículo principal: Conversión de Recaredo
A principios del año 587 Recaredo, que ya debía de tener simpatías católicas, se hizo bautizar en secreto. Desde entonces intentó convencer a los obispos arrianos para que aceptaran la doctrina trinitaria, celebrando tres reuniones: una con los obispos arrianos, a los que animó a reunirse con obispos católicos para discutir los problemas teológicos y determinar cuál era la verdadera fe; una reunión conjunta de obispos católicos y arrianos, con fuertes polémicas entre ambos bandos, y con un Recaredo presionando a favor de los católicos; y finalmente, no habiendo logrado convencer a los arrianos, una reunión con los obispos católicos a los que comunicó que ya había realizado su opción por el catolicismo. Al comunicarle a los obispos católicos su fe estaban presentes muchos nobles visigodos, y al parecer lo siguieron, y hacia la primavera y el verano del 587 las iglesias arrianas fueron expropiadas y entregadas a los católicos.

Nuevas embajadas a los reyes francos
Tras su conversión, Recaredo envió nuevas embajadas a Childeberto de Austrasia y Gontrán de Borgoña. Ofreció a Childeberto una fuerte suma (diez mil sueldos) y el rey austrasiano (aconsejado por su madre Brunegilda) reconoció que Recaredo no era culpable en absoluto de la muerte de Ingundis, concertándose un tratado de alianza. Incluso Recaredo negoció su enlace con Clodosinda, hermana de Childeberto, pero para concederla Brunegilda pidió el asentimiento de Gontrán. La embajada enviada a Borgoña solicitó este consentimiento pero Gontrán se negó a darlo. Unos meses después, Childeberto manifestó su aprobación del enlace, alegando que le constaba que los visigodos ya eran católicos, pero al parecer no llegó a celebrarse, pues en el 589 el rey ya estaba casado con Baddo, su concubina plebeya goda.

Conspiraciones arrianas y nueva guerra con Borgoña
La reacción arriana no se hizo esperar. El obispo arriano de Mérida, Sunna, y los nobles godos Segga y Vagrila (probablemente condes) proyectaron asesinar al obispo local católico, Masona, y al dux de Lusitania, Claudio, y alzar a toda la provincia, seguramente proclamando rey a Segga. No sabemos el desarrollo de la conspiración, pero parece ser que algunos nobles godos —que habían accedido a volver al arrianismo— recuperaron su antigua fe y que muchos ciudadanos romanos (supuestamente católicos) se les unieron. Al fracasar el intento de asesinato de Masona, uno de los conjurados, el futuro rey Witerico, seguramente conde, reveló los detalles de la conjura. Claudio sofocó fácilmente el intento. A Segga se le cortaron las manos (castigo que parece haber estado reservado a los usurpadores), se confiscaron sus propiedades y fue desterrado a Galicia.1​ Vagrila se refugió en la hoy Basílica de Santa Eulalia (Mérida), y el rey ordenó confiscar sus propiedades y entregarlas a dicha Iglesia, pero el obispo Masona le perdonó y se las devolvió. Sunna recibió la oferta de recibir otro obispado si se convertía al catolicismo (el obispado arriano de Mérida debió quedar suprimido y el católico ya estaba cubierto, en todo caso el obispado ofrecido no sería metropolitano). Sunna se negó y fue desterrado, marchando a Mauritania, donde propagó el arrianismo hasta su muerte violenta, cuya fecha se desconoce (se supone que alrededor del 600).

Recaredo ordenó la quema de todos los libros y textos arrianos, excluyó a los arrianos de cualquier cargo público y suprimió la organización de la Iglesia arriana, que desapareció en pocos años. Algunos godos fueron obligados a convertirse al catolicismo.

Un segundo intento arriano tuvo como protagonistas al obispo Uldila, cuya sede se desconoce, suponiéndose que pudiera ser el obispo de Toledo, que aunque nominalmente había abjurado, conservaba sus creencias arrianas, y a la reina Gosuinda, viuda de Atanagildo y Leovigildo. La conspiración fue abortada y Uldila enviado al exilio. Gosuinda murió poco después.

Una tercera conspiración se planeaba desde hacía unos meses: algunos nobles de Septimania preparaban una conjura para derrocar al rey. La encabezaban los condes Granista y Wildigerno y el obispo arriano de Narbona, Athaloc. Los conspiradores pidieron ayuda al rey de Borgoña Gontrán (que era católico).

Las hostilidades con Borgoña, suspendidas desde el 586, se reanudaron súbitamente en el 589. Las fuerzas borgoñonas al mando de Boso, que habían sido llamadas por los conspiradores, se acercaron a Carcasona, que al parecer fue ocupada, pero fueron derrotadas por fuerzas visigodas al mando de Claudio, dux de la provincia lusitana (aparentemente hispanorromano, aunque pudo haber adoptado un nombre romano al convertirse al catolicismo), en las cercanías del río Aude. Los francos dejaron sobre el terreno cinco mil cadáveres y dos mil prisioneros. La derrota fue completa y la seguridad de Septimania quedó asegurada. Parece ser que Granista y Wildigerno murieron en la lucha y que Athaloc falleció poco después de muerte natural.

El III Concilio de Toledo

Tremis de oro de Recaredo.
Poco antes de celebrarse el Concilio de Toledo, Recaredo comunicó que dejaba sin efecto la prohibición para la Iglesia de celebrar sínodos provinciales de obispos.

El 8 de mayo del 589 se inició el III Concilio de Toledo. Recaredo hizo profesión de fe católica y anatematizó a Arrio y sus doctrinas, se atribuyó la conversión del pueblo godo y suevo al catolicismo. Varios obispos arrianos abjuraron públicamente de sus creencias, entre ellos cuatro probablemente suevos: Beccila de Lucus (Lugo), Gardingus de Tute (Tuy), Argiovittus de Portus Cale (Oporto) y Sunnila de Vaceum (Viseo, seguramente de la provincia Lusitana); y otros cuatro godos: Ugnus de Barcino (Barcelona), Fruisclus de Dertosa (Tortosa), Maurila de Palentia (Palencia) y Ubiligisclus de Valentia (Valencia). Sabemos que a la reunión asistió un obispo de Pamplona llamado Loliolo (de nombre godo), pero posteriormente la sede dejó de estar representada hasta el año 684. Las resoluciones del Sínodo arriano de Toledo del 580 fueron condenadas. Asistieron al Concilio setenta y dos obispos, personalmente o mediante delegados (además de los cinco metropolitanos), siendo las figuras principales Leandro de Sevilla (instigador de la conversión de Hermenegildo) y el abad de Servitanum, Eutropio.

Las decisiones del Concilio adquirieron fuerza de ley al publicar el rey un Edicto de confirmación del Concilio. La desobediencia era castigada con graves penas (la confiscación de la mitad de los bienes para los honestiores y el destierro y la pérdida de sus propiedades para los inferiores).

La cuarta conspiración
Después del concilio, en el año 590 se organizó una nueva conspiración encabezada por Argimundo, cubiculario del rey y dux de una provincia, y por personas influyentes del palacio. Aunque los conjurados pretendían asesinar al rey y proclamar en su lugar a Argimundo, se ignora si intentaban restablecer el arrianismo o actuaban movidos por la ambición de poder. Descubierta la conjura, Argimundo sufrió flagelación, decalvación, amputación de la mano derecha y escarnio público.

Cambios sociales
Sabemos que, coincidiendo con la conversión al catolicismo, se produjeron algunos cambios sociales entre los godos: su forma de vestir se adaptó a la de los romanos, desapareciendo los tradicionales broches y hebillas, y las propiedades de los difuntos ya no se enterraron con estos2​sino que se incineraban.

Familia de Recaredo

La conversión de Recaredo, de Antonio Muñoz Degrain. 1888. (Palacio del Senado de España, Madrid).
Hubo negociaciones para casar a Recaredo con las princesas francas Rigunthis y Clodosinda, pero no consta que dichos enlaces llegaran a celebrarse. Poco antes del III Concilio de Toledo (589), Recaredo casó con la plebeya Baddo, Bado o Bada, con quien desde hacía ya algunos años estaba relacionado y tenido a su hijo Liuva. Su matrimonio fue realizado para complacer a la Iglesia, cuando ya estaba previsto que en dicho Concilio el rey haría profesión pública y solemne de abrazar la fe católica y por consiguiente también por parte del reino. De la importancia del acto es prueba el hecho de que Baddo, su esposa, fuese la única reina visigoda que firmó las actas de un Concilio.

Aunque se ignora la fecha de nacimiento del rey, sí se sabe que Hermenegildo, su hermano mayor, había nacido hacia el 564, por lo que él mismo hubo de nacer el 565 o después de esta fecha. Por tanto, en 589 contaba como máximo 24 años de edad. Su hermano Hermenegildo se casó el 579, contando, pues, 15 años de edad (la princesa Ingundis tendría unos 13 o 14 años). Las negociaciones para casarlo con Rigunthis se realizaron hacia el 582 o 583 cuando contaría poco más de 15 años, y las nuevas negociaciones de las que tenemos noticias son del 587, cuando contaba con poco más de 20 años. El enlace ya debía tener cierta urgencia, no por el hecho de que ya era rey (pues la monarquía no era hereditaria), sino por la edad de Recaredo, que inmediatamente casó con Baddo, su antigua concubina.

Su hijo, Liuva, nació hacia el 581 o 582 (en todo caso antes del 584) era producto de su relación con Baddo antes del matrimonio canónico, extremo apoyado por el texto de la Crónica de San Isidoro, que dice: «Ignobile quidem matre progenitus, sed virtutum indole in signitus» (que podría traducirse por «Fue creado por una madre sin duda oscura, pero destacó su carácter virtuoso»).

La cuestión bizantina
Hacia el 599 hubo una guerra contra los bizantinos, sin que sepamos las causas ni la evolución, aunque parece que la lucha fue favorable a Bizancio, que ocupó diversos territorios (no muy extensos en todo caso). Debió ser tras ello cuando Recaredo solicitó por mediación del Papa una copia del tratado concertado con los bizantinos, que fijaba los límites de la provincia de Spania (se supone que el ejemplar de los visigodos se habría perdido y el ejemplar imperial se supone destruido en un incendio seguramente en el 564 o 565). El Papa le respondió que desistiera de ello pues, caso de aparecer el tratado, aun con las presuntas conquistas bizantinas, el reino visigodo resultaría perjudicado, ya que la extensión de la provincia debía ser menor que en el momento del tratado (¿551?, ¿564?). Como sabemos que Leovigildo había recobrado toda o parte de la región del Estrecho (con Asidona), las regiones cercanas a Málaga y Baza (y tal vez la misma Baza) y probablemente el territorio entre Baza y Málaga, las regiones ocupadas por los bizantinos se situarían bien en la zona costera entre Málaga y Cartagena o bien en la zona del Estrecho.

Muerte de Recaredo
Recaredo murió en Toledo de muerte natural, el 21 de diciembre del año 601, y le sucedió su todavía muy joven hijo Liuva II,3​ del cual distintos autores discrepan sobre su legitimidad.

Referencias
 Isidoro de Sevilla, Historia de regibus Gothorum, Vandalorum et Suevorum, cap. 54.
 Strategies of Distinction: Construction of Ethnic Communities, 300-800 (Transformation of the Roman World) by Walter Pohl, ISBN 90-04-10846-7 (p.119-120: dress and funerary customs cease to be distinguishing features in 570/580)
 Ann Christys, Christians in Al-Andalus, 711-1000, page 37 (Curzon Press, 2002). ISBN 0-7007-1564-9
Bibliografía
Fuente, María Jesús (2009. 3ª edición.). Reinas medievales en los reinos hispánicos. La Esfera de los Libros. Serie Historia nº 15. ISBN 978-84-9734-237-7.
Thompson, E.A. (2007). Los godos en España. Alianza: Serie Humanidades. ISBN 978-84-206-6169-8.
Flórez, Enrique (1770). Memorias de las reynas catholicas, Historia Genealógica de la Casa Real de Castilla, y de León 1. Antonio Marín, Madrid. p. 22.
Véase también

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